Hace ya mucho tiempo...
· No sé si la decisión que tomé será la buena, la correcta, o podré llevarla a buen puerto. Lo único que sé es que necesito a alguien que me ayude, me reconstruya de nuevo porque estoy hecha pedazos. Simplemente no puedo más, me he cansado ya. No tengo ganas de disfrutar, no tengo ganas de nada.
no sé en qué día vivo, si habremos cabiado ya de mes o habremos empezado ya un nuevo año, pero lo que si consigo descubrir, es que las páginas escritas de este libro en blanco cuentan siempre la misma historia, los mismo sentimientos. La asfixia, la soledad, la angustia, la marginalidad, el dolor, el sufrimiento, el peso de todos ellos que pesa como una losa. No puedo asegurar con certeza que esto que vivo ahora permanezca los 365 días del año porque no escribo cada día ni todo se refleja aquí pero lo que si se refleja es la intensidad con la que se vive que nunca será la misma. Siempre escribo de mí, de mi vida, de mi autoestima y de la forma que tengo de mirar al mundo, que cada vez se ha enturbiado más. Antes tenía buenas anécdotas, momentos que mejoraban mi estado de animo por un tiempo ya fuera largo o corto eso no importaba. Desde hace ya mucho eso no importa, estoy estancada... Como esperando a que alguien abra la puerta para salir corriendo de mi propia vida, viviendo mi propio infierno. Despertándome todos los días una y otra vez, echándome las manos a la cabeza y pensando que sería del mundo sin mí.
Hace casi un año ya, escribía estos versos tan aterradores pero en los cuales consigo hallarme aún. Me parece increíble la forma en la cual he conseguido salir a adelante, superarme y intentar encontrar un resquicio de esperanza y alegría en ese hueco de infelicidad que se aloja dentro de mí.
no sé en qué día vivo, si habremos cabiado ya de mes o habremos empezado ya un nuevo año, pero lo que si consigo descubrir, es que las páginas escritas de este libro en blanco cuentan siempre la misma historia, los mismo sentimientos. La asfixia, la soledad, la angustia, la marginalidad, el dolor, el sufrimiento, el peso de todos ellos que pesa como una losa. No puedo asegurar con certeza que esto que vivo ahora permanezca los 365 días del año porque no escribo cada día ni todo se refleja aquí pero lo que si se refleja es la intensidad con la que se vive que nunca será la misma. Siempre escribo de mí, de mi vida, de mi autoestima y de la forma que tengo de mirar al mundo, que cada vez se ha enturbiado más. Antes tenía buenas anécdotas, momentos que mejoraban mi estado de animo por un tiempo ya fuera largo o corto eso no importaba. Desde hace ya mucho eso no importa, estoy estancada... Como esperando a que alguien abra la puerta para salir corriendo de mi propia vida, viviendo mi propio infierno. Despertándome todos los días una y otra vez, echándome las manos a la cabeza y pensando que sería del mundo sin mí.
Hace casi un año ya, escribía estos versos tan aterradores pero en los cuales consigo hallarme aún. Me parece increíble la forma en la cual he conseguido salir a adelante, superarme y intentar encontrar un resquicio de esperanza y alegría en ese hueco de infelicidad que se aloja dentro de mí.
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